Sopas con cúrcuma para un menú curativo

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Hoy voy a proponerte una receta muy fácil que te ayudará a la hora de crear un menú completamente sencillo y muy atractivo. Te hablo de las sopas con cúrcuma, apio, nabo y mejillones, que además de equilibrar los nervios, calmará el estado de tu sistema nervioso central, creando mucha más concentración y un efecto regenerador de todos los órganos de tu cuerpo.

Sírvela, por ejemplo, con una ensalada de cebolla y tomate, un pollo salteado al wok con pimientos y salsa de soja y con arroz cocido, que tomarás al final.

Receta de la sopa de apio, nabo y mejillones

Para realizar la sopa de apio, nabo, cúrcuma y mejillones, primero saltea una cebolla grande en una olla con un poquito de aceite de oliva o de maíz o semillas, hasta que se dore y agrega dos dientes de ajo picaditos, remueve bien durante dos minutos más.
El siguiente paso será añadir un poquito de apio (1 barrita)
2 nabos cortados en juliana
1 patata mediana
4 zanahorias medianas peladas (todo en taquitos pequeños), no te olvides de tostar bien las verduritas con un poquito de sal y azúcar moreno, hasta que tomen color (aproximadamente 5 minutos)
después agrega la cúrcuma, al menos 1 cucharada sopera o si te gusta más cargada 1 cucharada y media. Dale vueltas para que se mezcle bien.
Dale un hervor a las verduras cubriendo con agua, dejando cocinar al menos 15-18 minutos y después, tritura todo.
El último paso será saltear al menos 150 gramos de mejillones en una sartén con un poquito (una pizca) de sal y pimentón, agrega después un par de cucharadas de mejillones sobre la crema. ¡Te encantará!

Hay personas que no lo pasan por la batidora porque prefieren encontrar los trozos, pero recuerda, eso puede ir a tu voluntad y a tu gusto. Personalmente la textura crema queda deliciosa si la terminas con un buen chorrito de aceite de oliva.

Si lo encuentras en el supermercado o centros de alimentación gourmet, apuesta por el aceite a la albahaca, será el mejor remedio para aportar el sabor más increíble a tu plato.

Menú ying y yang

Si alguna vez has leído acerca de la tradición asiática de prevenir para evitar todo tipo de enfermedades, comprenderás lo exigente que es la cocina china de alta cuna con algo tan sencillo como puede ser un corte o también las combinaciones de alimentos.

Deberás saber que las zanahorias suelen cortarse a lo largo, así como los puerros y cebolletas largas, dejando el corte oblicuo o en transversal para los salteados variados.

Los menús ying y yang, se basan en la composición de un menú en el que siempre tiene que haber una sopa (para equilibrar el estado de la sangre), un plato de carne o pescado y también un plato de ensalada así como arroz.

Esta combinación, servida por este orden, facilita el buen funcionamiento de todos los órganos del cuerpo humano, eliminando todo tipo de propensión a tomar infecciones y a coger procesos víricos, facilitando también el buen estado de la sangre y su purificación.

¿Alguna vez has oído hablar de los organismos alcalinos y los que no lo son? Viene a ser algo parecido, encontrando el equilibrio de ácido en el interior, mejorando la respuesta del sistema inmunitario, entre otras cosas, incrementando la energía y la respuesta intelectual.